Realidades temporales que hacen consciente al mundo del abismo hacia el que el individuo se está velozmente acercando. Es más, el comienzo de su cumplimiento ha tenido lugar primero, sin que Occidente lo imaginase. En consecuencia, es particularmente esto lo que nos debe hacer reflexionar. Una experiencia concreta del modo de escapar a la destrucción humana y la destrucción cósmica. La invitación continúa, y quiere dar a entender a los desconfiados, las grandes verdades apoyadas por una imagen. No obstante, mientras la cultura de masas siga considerando el interior separado de la materia, no podrá desarrollar sus enormes posibilidades. Es decir, hasta ahora esta integración aún no se ha realizado plenamente, aunque se ha empezado a materializar. Es más, el análisis efectuado hasta aquí nos permite conocer al menos el porqué. Vacíos no conseguiremos realizar esta unificación. Por tanto, llegados a este punto, vale decir que cuánto más conocemos la plenitud más Le rogamos, más La amamos. O bien, en otras palabras, estaremos en disposición de conocer la integridad en la medida en que entre en el modo de pensar y de actuar de cada uno de nosotros. ¿Acaso una luz guiará las próximas investigaciones de carácter científico, en lo más profundo del ser o en un vacío que nos haga cuestionarnos qué es lo que nos falta? En fin, realidades temporales;
muy pequeñas y pasajeras.
Colección Experiencias de Paz. Foto con historia número 105 escrita por Carmen Rafecas. Imagen publicada libre de derechos de autor vía pixabay.