Unión de amor, silenciosa e invisible; ¡En medio de qué silencio se te ha hecho saber lo que es tierno! tan solo practicar el derecho, amar la dulzura, y caminar humildemente. Con tus lágrimas tenaces endulzas tu interior y ya no te dejas guiar por un corazón duro de oído y con ojos cerrados. Porque, al darte cuenta de quién está a tu lado, las lágrimas que resbalaban antes tristes, son ahora de alegría y complacencia. Pues, la conciencia de su cercanía en todas las circunstancias, es una de las experiencias fundamentales de tu lealtad. O bien, del mismo modo que la confianza lo puede todo, permitiéndose a uno mismo ser amado, encuentra el amor ilimitado en su vacío y su pequeñez. Ejemplo concreto que ayuda a entender, poco a poco, lo que su profundidad y conocimiento le permitan. Pues, del mismo modo que la comprensión no es concluyente, el amor permanece vigilante, cada día, con la lámpara encendida para oír y comprender. Necesidad custodiada de amor, aun cuando duda de que en su puerta le aguarda. Amistad duradera, confiada y personal que espera sin falta. Unidad de amor que, para poder expresarse, necesita de alguien oportuno que la reciba;
carisma de unir el medio con el Fin.
Colección Experiencias de Paz. Foto con historia número 18 escrita por Carmen Rafecas. Imagen de Moise Levi. Todos los derechos reservados.