Como ángeles del cielo no buscaban satisfacer la pasión, sino proceder de forma leal. Se alejaron de los errores y permanecieron unidos de edad en edad. Con las obras y el corazón, de palabra y con los labios, administraron rectamente sus asuntos y mantuvieron firme la fidelidad. Sinceramente y con honradez, se amaron con todo el corazón, con todo el entendimiento, y con todo el ser. Y esperanzados con la confianza que obtuvieron;

encendidos en el fuego de su amor, llegaron juntos a la vejez.

Post escrito por Carmen Rafecas.